(21 de Septiembre de 1994 / 30 de Diciembre de 2004 )
Sobre la camita quedó el anotador con su último dibujo: la tapa de un disco de Callejeros. Sobrino de uno de los encargados de seguridad de la banda, Gastón llevaba un año yendo a recitales, seduciendo a los grandes con sus cuentos de nene que está en todo: hacía taekwondo, le gustaba ir al taller de su papá, Eduardo, se quería teñir el pelo de rojo y convencer a su mamá, Elsa, para que también lo haga. Iba a pasar al 5º grado del Instituto Isidro Casanova. Y tenía que empezar natación en el club de su barrio.
JUSTICIA POR GASTÒN !!!
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